Sueño-vigilia
PSICOLOGÍA MAYO
Mayo es un buen momento para analizar cuales son las posibles causas por las que no podemos dormir. Dentro de los trastornos del sueño-vigilia existen tres tipo insomnio: el insomnio de conciliación, insomnio de mantenimiento e insomnio de despertar precoz.
Según el DSM-5* el insomnio de conciliación se caracteriza por la dificultad para iniciar el sueño. El insomnio de mantenimiento se caracteriza por la dificultad para mantener el sueño, que se caracteriza por despertares frecuentes o problemas para volver a conciliar el sueño después de despertar.
Por último el insomnio de despertar precoz supone despertar pronto por la mañana con incapacidad para volver a dormir.
Lo más curioso del insomnio es que cuando no podemos dormir parece que la noche se nos cae encima, y despertamos a todos los pensamientos irracionales para que vengan a conversar durante ese momento.
Mi objetivo de este artículo es dejar de normalizar el no descanso y empezar a buscar soluciones eficaces. Con esto quiero decir, que obviamente el efecto de los psicofármacos en nuestro cerebro hará que durmamos profundamente, pero este fármaco no hará que el problema o los problemas desaparezcan. Sintomatológicamente hará que por ciertas horas sientas que ese problema ha desaparecido, junto con el del sueño, pero cuando se acerque de nuevo la noche te verás con la necesidad de volver a consumirlo para poder “dormir” otra vez.
Es por eso que conocer las principales causas que generan insomnio se hacen necesarias para poder solventarlo.
Lo primero siempre es analizar trastornos del estado de ánimo, como es la depresión. El insomnio se caracteriza por ser un síntoma de la depresión, un factor que se incluye en que estemos tristes, por lo que primero habría que analizar si no hay este trastorno.
Lo siguiente es el trastorno por ansiedad, es decir, analizar si no hay ansiedad para ver la causa por la que tenemos ese insomnio. Estar muy nervioso, con sensaciones corporales que no nos dejan descansar o incluso porque estamos muy activados para poder dormir.
Si detectamos que no es ansiedad, lo siguiente es detectar si existe ansiedad cognitiva como son las preocupaciones excesivas. Esa manera recurrente de tener pensamientos imaginados y futuros sobre miedos que podrían pasar y que nos hacen estar continuamente desgastando nuestro esfuerzo, tiempo y ganas en buscarle posibles soluciones. Estas preocupaciones son una manera virtual de asustaste, y repetirla continuamente, pensar de manera circular en “y si me pasa esto” y no salir del bucle de pensamientos imaginados negativos, y claro, si estás muy activado no vas a poder dormirte tampoco.
Añadir que también hay tipos de drogas que afectarán al sueño directamente, estimulantes como la cafeína por ejemplo, se utilizan para quitar el sueño, pero cuidado con usarla de manera abusiva, ya que su efecto puede prolongarse y luego no puedes dormir en el momento que quieres hacerlo.
Ahora bien, todos estos problemas tienen solución eficaz a través de la psicología, y lo que yo ofrezco para solucionarlo es terapia basada en tratamientos eficaces que puede desempeñarlo cualquier psicólogo colegiado y con amplio conocimiento en técnicas. Eso sí, tendrás que poner muchas ganas en querer cambiarlo, ya que sin eso, será tiempo completamente perdido.
Si te has sentido identificado con lo que hemos puesto aquí, te recomiendo que le pongas solución, y si todavía no has probado la psicología para combatir esas noches largas que causan tanto malestar, vengas a consulta para evaluar tu caso específicamente.
¡Vuelve a darle calidad a tu sueño-vigilia!